sábado, 3 de marzo de 2012

Amigo mio

Sentimientos ocultos detrás de la razón.
Mensaje implícito en la letra de una canción.
Ángeles cayendo augurando un final.
Una guitarra emitiendo un sonido desafinado y sin compás.
Tus ojos en mis ojos. 
Tus labios en mis labios.
Tus manos en mis manos.
El tic-toc en mi mente de un reloj atrasado.
Una vida, un mes, un año.
Distracciones con nombre y apellido.
Sonrisas y confianza sin sentido.
Remordimiento de conciencia por el tiempo perdido.
Conocerte. Quererte.
Como un hermano verte.
Inconscientemente acercarme a ti.
A ciegas arriesgarme.
Entrar a un laberinto sin esperar encontrar la salida.
Concentrar mis energías en alguien más.
Darme cuenta de que no era eso lo que yo quería.
Peor aún, no era él lo que requería mi mente retorcida.
¿Decepción de él?
Para nada
¿Decepción de ti?
Ni pensarlo
¿Decepción de mi?
Seguramente
La guitarra sigue emitiendo ese sonido voraz para mis oídos,
mientras tu cantas deleitando a tus discípulos.
Soledad siento en tu mirada.
Calor de invierno en tus abrazos.
¿Qué pasará después?
Sin seguridad me muevo.
Lo mejor que puede pasar es conservar todo como está.
Espero de verdad tu me aceptes sólo así, sin más.
Amigo mio eres.
Ángel de mis noches frías y obscuras.
Guardián de mis secretos sagrados.
Portador de amor que calma mi ser desesperante.
¿Te puedo pedir un favor?
Nunca me dejes sola.
Nunca te vayas.
Nunca abandones mi alma sedienta de ti.
Simplemente por favor, no me dejes ir. 





No hay comentarios:

Publicar un comentario